Es una profesión de amor, humor y dolor.
Vivo en esta trinidad desde hace 53 años.
Son irrenunciables.
Los vivo en sus profundidades y sus cimas.
Por eso leo con deleite y adhesión “Escribiendo tu historia”.
Es el sabroso fruto del concurso literario al que convocó en 2017 el Círculo de Periodistas. Conmemoró sus 110 años.
Recibieron 55 testimonios de reporteros de la capital, de regiones e incluso del extranjero.
“Eran llenos de gracia, como el Ave María”, sentenciaba Raúl González Alfaro.
El jurado fue idóneo.
Lo encabezó Douglas Hübner, presidente del Círculo.
Lo integraron Andrés Pascual, de Comunicaciones de la Unesco; Ximena Pou, de la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones de la Universidad de Chile; Roberto Rivera, presidente de la Sociedad de Escritores, e Ignacio González Camus, ex presidente nacional del Colegio.
Son notables historias. Disfruté con su lectura y la honradez intelectual y ética de sus autores. Gazi Jalil Trebotic define: “Este libro representa una meta y, además, un compromiso para continuar fomentando entre nuestros socios la redacción literaria de alto nivel mediante el recuerdo de historias periodísticas que merecen pasar a la posterioridad”
El primer premio lo ganó Luís Arancibia Urzúa con “Vivir lo soñado”.
El autor es talquino. Desde 1974 vive en Madrid. Trabaja desde hace 34 años en Radio Televisión Española.
Acá trabajó en radio Chilena y envió artículos para la página web de Cooperativa.
Tras leer toda la obra, coincido con el ganador.
No obstante, la mayoría de los relatos alcanza la excelencia y transparente sinceridad.
Luis Arancibia estudió en la Universidad de Chile.
Admiraba a Tito Mundt, Luis Hernández Parker, Adolfo Yankelevich. Gozaba al leer las crónicas de Érika Vexler y de María Romero y Marina Navasal, de Ecrán, quienes entrevistaban a las estrellas mundiales de cine.
Debutó en radio Chilena, cuyo jefe era Mauricio Montaldo, el que reside en Miami. Simpáticas anécdotas del joven que no sabía manipular una grabadora.
Y ejemplo de valentía e independencia contra la censura de Vicente Huerta, general director de Carabineros. A Luis Arancibia lo respaldó el cardenal Raúl Silva Henríquez.
Entre todos los relatos que atrapan, me llamó la atención el de Juan Emilio Herrera González.
A sus 17 años se infiltró en una conferencia de prensa del general René Schneider, comandante en jefe del Ejército. Estaba en Concepción.
Escribe: “Apenas vio entrar al muchacho, el general le sonrió. De seguro sintió curiosidad por ese chiquillo pálido y esmirriado en el quehacer periodístico y lo miró con simpatía”.
Herrera se atrevió a preguntar si habría cambios en el ejército con su nombramiento.
Le respondió que no. Fue el titular del vespertino Crónica.
La esclavitud del espacio me impide destacar todos los notables testimonios de “Escribiendo tu historia”.

Por Enrique Ramírez Capello


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