Tras intensos trabajos de remodelación el sitio de memoria que recuerda a los periodistas asesinados y/o desaparecidos en la dictadura de Augusto Pinochet volvió a tener activo el flujo de agua en la estructura que corresponde al memorial, presentando también una estética remozada.
Inaugurada el 8 de septiembre del año 2006, la obra fue el último proyecto impulsado por Alejandro Cabrera, destacado exdirigente del Círculo de Periodistas de Santiago, antes de su fallecimiento en marzo de ese mismo año.
La fecha en la que se presentó oficialmente la estructura, en la que se encuentran grabados los nombres de los 31 periodistas y estudiantes de periodismo ejecutados o desaparecidos por agentes del Estado durante la dictadura, se escogió en homenaje a José Carrasco Tapia, colega ejecutado por la CNI en 1986.
El flujo de la memoria
“El Colegio de Periodistas y el Círculo tomaron la decisión de hacer este memorial porque representa cómo fue golpeado el periodismo en dictadura, y tenemos en el recuerdo el nombre de todos nuestros colegas asesinados porque lucharon por la libertad de expresión”, indicó la histórica dirigenta del Colegio de Periodistas, Oriana Zorrilla.
En este mismo sentido, la periodista recordó especialmente hitos como la entrega de títulos póstumos a los estudiantes de periodismo cuyos nombres se encuentran en el memorial y el secuestro de Guillermo Gálvez Rivadeneira por agentes de la DINA en las dependencias del Círculo, quien aún figura como Detenido Desaparecido.
“Esto representa lo mejor del periodismo. Tener este memorial nuevamente funcionando es refrescar la memoria. Tenía el flujo de agua detenido, y verla correr de nuevo refleja lo que es la memoria, el cómo fluye”, agregó metafóricamente, haciendo un llamado a los medios a considerar este sitio de memoria como una voz a la que hay que dar mayor representación.
Purísima Gaune, Presidenta del Círculo de Periodistas junto a Marcial Campos, Presidente de la Asociación Nacional de Periodistas Jubilados, en la reinauguración del memorial.
